martes, 15 de septiembre de 2015

VERANO, VERANO

Partiendo de la idea, mejor, del hecho de que yo, Paco, he cumplido los 55, el número de la doble rima absurda y de que que me siento muy a gustito con mi edad y con la de los demás, hay que decir que celebré un gran cumple familiar. Y con Jesusito, que cumplió dos añitos, soplamos las velas.

Hoy, con el guapo subido,
espléndido me he levantado
y con churros he desayunado.

He dado un gran brinco,
porque he cumplido 
los cincuenta y cinco,
con todas las rimas absurdas
que un ser humano puede cumplir.

Y no me he dejado abatir,
por más que me puedan decir...
por el trasero te la ....

Tomé un buen trozo de tarta,
hasta tener mi barriga bien harta,
soplé las velas, soplé un cincuenta y cinco,
y nuevamente la rima del te la ...
sonó a mis espaldas, mal rayo te parta.











Y luego, días más tarde, pues eso, Lola y yo nos fuimos a hacer un viajecito. Allá por Praga que nos fuimos. Lo pasamos genial y nos movimos estupendamente por toda la ciudad en nuestro número 9 de los tranvías.

Comimos esas peazos de salchichas, bebimos cerveza de muchas marcas y colores, nos movimos entre el barrio judío, la plaza de Wenceslao, el reloj astronómico y el puente de Carlos, lugares en los que una gran torre de Babel en llano nos acogió en nuestra visita.

Disfrutamos de tantos bellos sitios y, como dijo Lola, una ciudad para mirar hacia arriba, sus monumentos, sus edificios...